Contaduría Pública abril 2021
tiempo aire y recargas de celulares, tala de bosques, sobreexplotación de recursos naturales, alimentación basada en el reino animal, migración de personas a ciudades; también existe la posibilidad de un error humano de laboratorio carente de ética. A esta pro- blemática se agrega una lista de cánceres sociales: co- rrupción, impunidad, violencia, delincuencia organi- zada internacional, lavado de dinero y ciberataques a negocios. Estos conflictos sociales vulneran el derecho a la vida, a la libertad y la propiedad de las personas, deteriorando su calidad de vida y la del planeta tierra. ¿Ética, ciencia o arte? Los científicos más notables de la historia legaron va- rios principios que pueden ser de utilidad a las cien- cias sociales como la ética para el bienestar común de la especie humana. Aristóteles (384-322 a.C.) creó el método científico por su teoría metafísica, lógica y teorías humanas; Isaac Newton (1642-1727) inventó las leyes universales de la inercia, ley de la dinámica acción y reacción y ley de la gravitación universal. Por medio de estas leyes aseveró que el universo podría ser objeto de fuertes catástrofes de dimensiones incalcu- lables a fines del siglo XXI. En relación con el principio y fin del universo, Stephen Hawking, científico destacado del siglo XX, en su es- tudio “Teoría del todo 2007”, refiere que el universo se originó en el Big Bang, hace unos 10,000 millones de años y que el fin de este podría ser en un periodo simi- lar de años. Las teorías científicas de Aristóteles, Newton y Haw- king se sustentan en varios principios científicos, den- tro de los que destacan: > Gravitación universal. > Incertidumbre. > Conocimiento pertinente. > Integridad del bien común. > Justicia y equidad inclusiva. Aristóteles, iniciador del método científico, divulgó con énfasis los principios de integridad del bien co- mún, justicia y equidad inclusiva, aplicables a las rela- ciones humanas. La ciencia tiene como propósito el bien común me- diante la invención de satisfactores de las necesida- des humanas; por su parte, la ética también busca ese mismo fin. Por lo tanto, la ética puede ser con- siderada como teoría científica, aplicable universal- mente a las actividades de las personas en el uso y C.P.C. y M. en C. H umberto S aucedo V enegas Colegio de Contadores Públicos de Zacatecas Universidad Autónoma de Zacatecas svycia05@yahoo.com.mx ¿Estaremos ante el fin de una época o principio de una nueva era? La historia como fuente de la ciencia puede dar la res- puesta. Para introducir al tema, en el mes de abril de 1921, en el centro histórico de la Ciudad de los Palacios como se le conoce a la capital de la República Mexica- na, Ramón López Velarde escribió: “Suave patria: per- mite que te envuelva en la más honda música de selva con que me modelaste por entero al golpe cadencioso de las hachas, entre risas y gritos de muchachas y pája- ros de oficio carpintero…”. Al tiempo que se escribe este artículo, las campanas de los templos han dejado de sonar, en los pasillos de escuelas y universidades no se escuchan las risas y gri- tos de muchachas de López Velarde. La causa de estos sinsabores es el odioso COVID-19, que ha sembrado incertidumbre, miedo, nostalgia, crisis de salud, retro- ceso en la cultura de los pueblos y, por si fuera poco, un colapso económico sin precedentes. ¿Hacia dónde va el universo, tendrá un fin? ¿Qué refie- re la teoría económica y social al respecto? Ante estas interrogantes, la duda como parte de la ciencia está presente, lo seguro es la incertidumbre sobre el deve- nir de la especie humana. ¿Por qué escribir este artículo? A mediados del mes de marzo de 2020, la población de varios países entró en confinamiento en una cua- rentena de más de 360 días. Se repetía la historia de la década de 1930, cuando la economía mundial entró Ética en la ciencia económica Propuesta de calidad para vida humana y terrenal en depresión, en la parte más baja del ciclo económi- co, según los economistas de la época. La cuarentena de 2020, propiciada por la pandemia de COVID-19, provocó que la economía mundial entrara en rece- sión, que por sus caracterizaciones se califica como depresión económica. ¿Cuál debe ser el papel de la ética, para contribuir con la ciencia económica? ¿Volverá a ser el mundo igual que antes del COVID-19? Propósito de este artículo El presente artículo se propone identificar y divulgar algunas causas que incidieron en las crisis de salud y derrumbe de la cadena de valor, con la finalidad de aportar ideas para una teoría científica en el marco de la ética y la integridad del bien común, que sea útil a las personas de las generaciones futuras de México y América Latina para que enfrenten los retos, desafíos e incertidumbre que el universo presenta. A manera de hipótesis ¿Qué fue realmente lo que causó la crisis de salud y económica que vive la sociedad mundial? La duda como materia de la ciencia es la respuesta. Hay mu- chas conjeturas sobre la aparición del COVID-19, cau- sante de ambas crisis, lo más probable es la fuerte pre- sión ejercida por la especie humana sobre la masa de la tierra; contaminación del aire, mares, ríos y tierra; agotamiento de los recursos naturales por su uso des- medido; consumo exponencial de bienes y servicios aprovechamiento de los ecosistemas acuático, terres- tre, celeste y tecnológico digital. Fuerza humana vs. fuerza masa terrestre El 19 de noviembre de 1919, la Abuela Petra dijo haber presenciado algo equiparable al fin del mundo, cuan- do de camino al templo la Tierra se oscureció por más de once minutos, tiempo que permaneció de rodillas al igual que la gente del pueblo. Se trataba del eclipse total de sol más largo en la historia de la humanidad, fue así que vaticinó que era una primera amenaza para el fin del mundo. ¿Qué dice la ciencia al respecto? Bos- trom y Cirkovic argumentan que el planeta Tierra está expuesto a graves riesgos, destrucción masiva, guerras nucleares y bacteriológicas, impactos de asteroides, fuertes erupciones volcánicas, pandemias y terroris- mo nuclear. 1 En relación con el tema, el Papa Francisco, en la última encíclica Fratelli tutti: sobre la fraternidad y la amistad social , refiere que el mundo está colgado de alfileres, que en cualquier momento puede sufrir gra- ves colapsos por el desgaste de los tres grandes ecosis- temas: acuático, terrestre y celeste. 2 La fuerza ejercida por la especie humana sobre la Tierra es cada vez más intensa. Interpretando a Newton en la tercera ley de la acción y reacción, po- demos deducir que el planeta Tierra ha empezado a reaccionar en contra de la especie humana con la pandemia de COVID-19, sismos, temblores, aguas torrenciales, terremotos y otros desastres naturales. Si aplicamos la ley de Newton de acción y reacción en la que F1 equivale a 7.5 mil millones de personas que habitan el planeta Tierra ejerciendo una fuerza sobre su masa, representada por –F2 equivalente a 6,600 trillones de toneladas, que permanece estática, mien- tras que la fuerza poblacional crece exponencialmente (véase figura 1). Figura 1. Fuerza poblacional vs. masa terrestre Fuente: elaboración propia. MISCELÁNEO 62 CONTADURÍA PÚBLICA 63
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